B-24 Liberator

Profundidad (mínimo - máximo): - 19 m hasta -22 m
Tipo de buceo: Pecio
Snorkeling: No

• Características del sitio:
Son los restos de un avión de combate de EE.UU. que se perdió en la noche, en plena 2 ª Guerra Mundial, el 30 de noviembre de 1943. Era uno de cuatro bombarderos B-24 Liberator de la Marina Estadounidente que componían la patrulla anti-submarina en el Golfo de Cádiz, con 11 tripulantes a bordo. Seis murieron en el momento de la caída, el resto fue salvado por un pescador que estaba cerca aquella noche.
Se puede ver la estructura casi completa, con sus dos alas, con 34 metros de envergadura, en posición invertida. A pesar de que las hélices se han trasladado, todavía se pueden ver los motores, así como los compartimentos del tren de aterrizaje. El fuselaje, el cuerpo principal de la aeronave, desapareció y todavía está siendo objeto de registros. Alrededor hay un amplio campo de escombros, donde destacan dos de las hélices (cuyas hojas tienen casi un metro de largo), un rotor de motor y un timón vertical, es posible verlos realizando un pequeño ejercicio de navegación subacuática.


• Fauna:
El B-24 es ahora un hermoso arrecife artificial, que sirve de abrigo a una verdadera nube de abadejos. Las vigas de la estructura interna de las alas son el refugio perfecto para otros peces e invertebrados, como meros, gobios, centollos, gálatas, pulpos, camarones, langostas, congrios e incluso algunas morenas, que también residen en el pecio.

• Consejos de buceo:
Se trata de ua estructura de aluminio con una corrosión muy avanzada en algunas zonas, y por lo tanto muy frágil. Además, es un monumento a todos aquellos que lucharon en la Segunda Guerra Mundial, y una tumba para la tripulación de 6 personas que murieron allí. Hoy es un oasis de vida en medio de una gran extensión de arena que lo rodea y ha de ser preservada para todos nosotros. Por ello no usa ancla, sólo se coloca una boya para marcar, el cable sólo sirve como una referencia visual para el descenso.
Tras el descenso, la flotabilidad debe ser controlada para no acabar “aterrizando” en la parte superior del avión! Explorar despacio, cuidadosamente y en detalle la estructura del ala. Hay muchos detalles que deben observarse con cuidado. Luego vaya a la punta sur del ala, donde habrá un cable que se conecta con el estabilizador horizontal de la cola. A continuación, volver a la derecha y si aún tienen tiempo de fondo y aire, con una brújula, siga la dirección indicada por la guía hacia el resto de los desechos. Esta es una de las inmersiones en la que nuestra curiosidad y capacidad de navegación se pueden poner a prueba.


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